La vida de los ecuatorianos tomó como normalidad cultural la violencia, la indiferencia, la crueldad. En las culturas territoriales del país, quizás ninguna de ellas fueron mas crueles que las de la Amazonía. Hasta el día de hoy los enfrentamientos entre Huaos y Taromenani, significan el extremo de la crueldad y la crudeza en las matanzas. Esto se debe a que en la Amazonía, la agricultura fue incipiente, la tierra ácida, que antes fue fondo marino, no tiene una capa fértil muy grande, esta capa la fabrican los árboles con su hojarasca, y es retenida por sus raices, que evitan sea arrastrada por las torrenciales lluvias, que antes de este siglo, daban a la zona dos temporadas llamadas invierno y diluvio. En estas condiciones, los territorios de caza, recolección y pesca se garantizaban mediante la violencia extrema.
Los Shuar, la etnia mas numerosa de indígenas que hicieron presencia desde el Huallaga en el el Perú hasta el Napo en Ecuador, en un territorio muy grande, tenían por valor cultural, el derecho del hombre a tener cuanta mujer le sea posible conseguir, mediante la intimidación ya sea como guerrero o como curandero - shamán. Las mujeres a su disposición podían ser violadas, usada y hasta asesinadas, y ese era un derecho incuestionable del hombre, que podía hacer lo mismo con sus hijos. Fue la llegada de la iglesia y su presencia a partir de la segunda década del siglo XX que cambió estas conductas.
En la Sierra la violencia venía de los patronos y blancos, así como de los mestizos contra los indios a los que a más de que se les obligaba a vivir dentro de las haciendas, se les mantenía en calidad de esclavos, mediante deudas que nunca se terminaban de pagar y pasaban de padres a hijos. La pernada, era un derecho de los patrones a forzar a las niñas y jóvenes que querían casarse, se las obligaba a perder la virginidad en manos del patrón, o los hijos, familiares o amigos del dueño de la hacienda. Los indígenas tenían que bajarse de las veredas cuando por ella pasaba un blanco o mestizo, y además sacarse el sobrero. Incluso en las haciendas se les marcaba como al ganado, para indicar su relación de dependencia con algún terrateniente. Cuando una mujer indígena, no había sido desvirgada por un blanco o su patrón era rapada su cabellera y entregada al cura para su uso y servicio. Es así como los curas en el país llegaron a tener numerosos hijos, pero a los hijos de cura se los miraba con un desprecio mayor que a los hijos ilegítimos. No fue sino hasta la segunda mitad del siglo XX, que en las cédulas de identidad, se dejo de señalar la raza, y si era hijo legítimo, ilegítimo o hijo de cura. Hasta los años ochenta, los jóvenes ricos y aristócratas en Cuenca, tenían como entretenimiento salir en auto por las carreteras y cuando veían una mujer de su interés con su pollera, le subían el vestido para cubrirle la cara y cabeza de manera que no viera y sus brazos quedaran inmovilizados dentro del traje y luego venía la violación grupal.
En la Costa, la violencia entre vecinos y la violencia intrafamiliar era vista con indiferencia y con normalidad. Hasta hoy muchos de los hombre montubios y manabas, decían que ellos " no hacían altar para que otro celebre misa" y con esa excusa, violaban a sus hijas y con más derecho si eran hijastras. El resolver las disputas con asesinatos, y los asesinatos de mujeres por celos, o cualquier pretexto, sea porque se atribuían este derecho por haberse enamorado, porque simplemente la muchacha no le correspondía a sus antojos, por celos, dudas o rabias encendidas. Hasta hoy muere una mujer cada día en Ecuador por este motivo.
Es solo a partir de la nueva constitución del 2008 y con la presencia del sensacionalismo en la prensa que busca ventas mediante le morbo, este problema se hace visible, pero hasta el día de hoy se lo toma como una suerte ajena que nunca tocará mi puerta.
La educación durante todos los tiempos en especial en el siglo XIX, cuando García Moreno llegó a ser el dictador temible por quince años, se consideraba que "la letra con sangre entra" y hasta fines del siglo XX, la crueldad pedagógica se la ejercía repitiendo las palabras "García Moreno" quita lo malo y pone lo bueno, mientras los estudiantes eran víctimas de castigos infames.
La corrupción era un derecho de los que llegaba a cargos públicos, empezando por los profesores de las escuelitas rurales, que para redondear su salario, obligaban al pago de cuotas extraordinarias, hasta los médicos, que encontraban excusas para no atender a sus pacientes en los servicios estatales, y derivarlos a sus consultas y clínicas privadas
Pero la mayor corrupción siempre estuvo en la policía y la justicia. Ecuador es considerado uno de los países con la justicia más corrupta del mundo, por lo que hasta el día de hoy, cambiar esto ha significado j enfrentamiento. La prensa desgraciadamente también ha sido en extremo corrupta y corruptible, parte de drama de vivir en este país. En Ecuador, la policía que nunca fue una institución correcta, al menos no ha creado miedo como en el resto de América Latina, donde la policía y el ejercito han sido temidos por sanguinarios y corruptos. En Ecuador, los policías han sido gente comprable, que trabajan y se mueven si hay dinero de por medio, que entre en sus bolsillos y la de sus jefes, pero su conducta ha sido menos autoritaria. Esto ha sido visible hasta hace poco, donde el jefe provincial de la policía de Esmeraldas era parte de una red de narcotráfico y fue detenido y encarcelado por eso, luego de ser considerado el policía más drástico que había llegado a la provincia.
La destrucción de la naturaleza, ha sido otro de los puntos que sólo a finales del siglo XX tomó importancia, pues durante décadas, los bosques era zonas llamadas tierras baldías, esto es inútiles y había que depredar y exterminar cuanta forma de vida exista allí, y convertirla en potrero o cultivos, para que sea tierra con papeles y propietarios, esto es tierra "productiva". Esta conducta, que en este siglo XX es reprochable, era normalidad y para la gente era lo más indiferente el ver incendios de selva, los paramos, manglares o bosques, pues talar y quemar incluso sólo por entretenimiento en los veranos era parte de los juegos de niños. Pero ahora se tiene la primera constitución del mundo que da derechos a la naturaleza y se promueve la no explotación de la gran reserva petrolera del Yasuní como ejemplo al mundo de lo que se puede hacer para evitar el calentamiento global
Los Shuar, la etnia mas numerosa de indígenas que hicieron presencia desde el Huallaga en el el Perú hasta el Napo en Ecuador, en un territorio muy grande, tenían por valor cultural, el derecho del hombre a tener cuanta mujer le sea posible conseguir, mediante la intimidación ya sea como guerrero o como curandero - shamán. Las mujeres a su disposición podían ser violadas, usada y hasta asesinadas, y ese era un derecho incuestionable del hombre, que podía hacer lo mismo con sus hijos. Fue la llegada de la iglesia y su presencia a partir de la segunda década del siglo XX que cambió estas conductas.
En la Sierra la violencia venía de los patronos y blancos, así como de los mestizos contra los indios a los que a más de que se les obligaba a vivir dentro de las haciendas, se les mantenía en calidad de esclavos, mediante deudas que nunca se terminaban de pagar y pasaban de padres a hijos. La pernada, era un derecho de los patrones a forzar a las niñas y jóvenes que querían casarse, se las obligaba a perder la virginidad en manos del patrón, o los hijos, familiares o amigos del dueño de la hacienda. Los indígenas tenían que bajarse de las veredas cuando por ella pasaba un blanco o mestizo, y además sacarse el sobrero. Incluso en las haciendas se les marcaba como al ganado, para indicar su relación de dependencia con algún terrateniente. Cuando una mujer indígena, no había sido desvirgada por un blanco o su patrón era rapada su cabellera y entregada al cura para su uso y servicio. Es así como los curas en el país llegaron a tener numerosos hijos, pero a los hijos de cura se los miraba con un desprecio mayor que a los hijos ilegítimos. No fue sino hasta la segunda mitad del siglo XX, que en las cédulas de identidad, se dejo de señalar la raza, y si era hijo legítimo, ilegítimo o hijo de cura. Hasta los años ochenta, los jóvenes ricos y aristócratas en Cuenca, tenían como entretenimiento salir en auto por las carreteras y cuando veían una mujer de su interés con su pollera, le subían el vestido para cubrirle la cara y cabeza de manera que no viera y sus brazos quedaran inmovilizados dentro del traje y luego venía la violación grupal.
En la Costa, la violencia entre vecinos y la violencia intrafamiliar era vista con indiferencia y con normalidad. Hasta hoy muchos de los hombre montubios y manabas, decían que ellos " no hacían altar para que otro celebre misa" y con esa excusa, violaban a sus hijas y con más derecho si eran hijastras. El resolver las disputas con asesinatos, y los asesinatos de mujeres por celos, o cualquier pretexto, sea porque se atribuían este derecho por haberse enamorado, porque simplemente la muchacha no le correspondía a sus antojos, por celos, dudas o rabias encendidas. Hasta hoy muere una mujer cada día en Ecuador por este motivo.
Es solo a partir de la nueva constitución del 2008 y con la presencia del sensacionalismo en la prensa que busca ventas mediante le morbo, este problema se hace visible, pero hasta el día de hoy se lo toma como una suerte ajena que nunca tocará mi puerta.
La educación durante todos los tiempos en especial en el siglo XIX, cuando García Moreno llegó a ser el dictador temible por quince años, se consideraba que "la letra con sangre entra" y hasta fines del siglo XX, la crueldad pedagógica se la ejercía repitiendo las palabras "García Moreno" quita lo malo y pone lo bueno, mientras los estudiantes eran víctimas de castigos infames.
La corrupción era un derecho de los que llegaba a cargos públicos, empezando por los profesores de las escuelitas rurales, que para redondear su salario, obligaban al pago de cuotas extraordinarias, hasta los médicos, que encontraban excusas para no atender a sus pacientes en los servicios estatales, y derivarlos a sus consultas y clínicas privadas
Pero la mayor corrupción siempre estuvo en la policía y la justicia. Ecuador es considerado uno de los países con la justicia más corrupta del mundo, por lo que hasta el día de hoy, cambiar esto ha significado j enfrentamiento. La prensa desgraciadamente también ha sido en extremo corrupta y corruptible, parte de drama de vivir en este país. En Ecuador, la policía que nunca fue una institución correcta, al menos no ha creado miedo como en el resto de América Latina, donde la policía y el ejercito han sido temidos por sanguinarios y corruptos. En Ecuador, los policías han sido gente comprable, que trabajan y se mueven si hay dinero de por medio, que entre en sus bolsillos y la de sus jefes, pero su conducta ha sido menos autoritaria. Esto ha sido visible hasta hace poco, donde el jefe provincial de la policía de Esmeraldas era parte de una red de narcotráfico y fue detenido y encarcelado por eso, luego de ser considerado el policía más drástico que había llegado a la provincia.
La destrucción de la naturaleza, ha sido otro de los puntos que sólo a finales del siglo XX tomó importancia, pues durante décadas, los bosques era zonas llamadas tierras baldías, esto es inútiles y había que depredar y exterminar cuanta forma de vida exista allí, y convertirla en potrero o cultivos, para que sea tierra con papeles y propietarios, esto es tierra "productiva". Esta conducta, que en este siglo XX es reprochable, era normalidad y para la gente era lo más indiferente el ver incendios de selva, los paramos, manglares o bosques, pues talar y quemar incluso sólo por entretenimiento en los veranos era parte de los juegos de niños. Pero ahora se tiene la primera constitución del mundo que da derechos a la naturaleza y se promueve la no explotación de la gran reserva petrolera del Yasuní como ejemplo al mundo de lo que se puede hacer para evitar el calentamiento global