PORQUE QUITO NO PUEDE ESTAR ENTRE LAS 7 CIUDADES MARAVILLAS DEL MUNDO.
Quito está entre las ciudades nominadas a ser una de las 7 ciudades maravillas del mundo, pero en verdad no merece ser considerada en ese nivel por cuanto tiene una de las mayores contaminaciones atmosféricas y dada su altura esta contaminación se vuelve extremadamente peligrosa.
Esta ciudad con 400.000 autos, y 20.000 buses, un tercio del parque automotor del país es una ciudad llena de ruedas que casi no se mueven en especial en las horas pico, a pesar de medidas que restringen el trafico ciertos dias y ciertas horas según el número de placa
Además de la contaminación por gases, tiene una de las peores contaminaciones por ruido, que viene no sólo de que los conductores son groseros en el uso del claxon, sino que los autos, las casa y los comercios, instalan alarmas que están produciendo ruido dia y noche, se puede decir que es una ciudad histérica.
Por otro lado los jóvenes son unos canallas que usa las paredes para mancharlas, desacreditar a otro ser humano como pasquín y ni siquiera para hacer arte o expresar ideas; las bandas juveniles lo ensucian todo a su paso, sin importar para nada nada.
Otro de los elementos degradantes de la ciudad es la conducta de su gente, que usan las areas turísticas y cualquier lugar para vomitar luego de beber. Este espectáculo en especial de mujeres borrachas, y jóvenes que es inusual en otras partes del país aquí es lo cotidiano en el fin de semana.
Uno de los elementos fundamentales que se debe considerar para calificar como ciudad maravilla, es las calidad de su gente, pero la gente de Quito rara veces sonríe, guarda un gesto agresivo y hostil en los lugares públicos, pues viven a la defensiva, ya que esta ciudad es la Meca de los ladrones sutiles que por lo general son gente local y de los ladrones groseros y brutales, que por lo general son migrantes o o visitantes en especial de la costa.
Otro elemento para descalificar a Quito como ciudad maravilla, es su sistema de transporte público, en especial el del municipio, que más que un sistema de transporte es un sistema de humillación y un lugar propicio para el robo.
Los taxistas están atentos a la minima posibilidad de sorprender al usuario con los precios de la carrera, a pesar de ser obligatorio los taxímetros, y se robarán el equipaje o le que haya quedado a bordo de sus autos al menor descuido del pasajero, sin contar que se cuentan entre los violadores de la ciudad, cuando tiene la oportunidad con alguna pasajera ebria o que esté a su alcance.
Los conductores, no tienen el menor respeto por el peatón, cuando tienen que curvar en una esquina consideran que es un atrevido el peatón que quiere cruzar la calle y lo envestirán, sin importar edad sexo o condición, se estacionan en la veredas o en las zonas de circulación de bicicletas, se consideran una clase social superior a la de aquellos que van por la vereda caminando, y los ven como alguien inferior al que pueden insultarlo por cualquier incomodidad que les cause.
Los conductores guardan una conducta que estalla al menor detalle en gestos y palabras brutales que desdicen de su cuna y de su valia.
Cuando una mujer camina en la calle o sube a un medio de transporte público, esta sujeta a escuchar groserías a las que llaman piropos, o incluso a ser tocada de mara disimulada o grosera y cualquier reacción de ella en lugar de hacerlos avergonzar, los pone cabreados alevosos y hasta pretenden golpear a la muchacha que se atreve a exigires respeto. Aunque el municipio hace campaña contra esto, se trata de una cultura machista propia de este lugar, por lo que Quito no merece ser considerada una maravilla del mundo
En el centro de la ciudad las esquinas son urinarios, los niños corren serios peligros en esta ciudad si llegan a perderse o se sueltan de las manos de sus padres, en tanto los colegiales son las víctimas más comunes de los ladrones.
Los terminales de transporte terrestre y el aeropuerto están distantes del centro, por lo que sale más caro el transporte al centro, que los pasajes por tierra, sin contar con el tiempo que se requiere.
Esta ciudad además es el principal foco contaminante en la Sierra norte con sus aguas servidas, estas terminan afectando a ríos que son fuente de agua de poblaciones como Santo Domingo, Quinindé, y Esmeraldas, lo que afecta a una población mayor que la de la capital.
Estos son entre otras las razones para que Quito no sea considerada una ciudad maravilla, hasta que se logre cambios radicales en los arriba mencionado.
Quito está entre las ciudades nominadas a ser una de las 7 ciudades maravillas del mundo, pero en verdad no merece ser considerada en ese nivel por cuanto tiene una de las mayores contaminaciones atmosféricas y dada su altura esta contaminación se vuelve extremadamente peligrosa.
Esta ciudad con 400.000 autos, y 20.000 buses, un tercio del parque automotor del país es una ciudad llena de ruedas que casi no se mueven en especial en las horas pico, a pesar de medidas que restringen el trafico ciertos dias y ciertas horas según el número de placa
Además de la contaminación por gases, tiene una de las peores contaminaciones por ruido, que viene no sólo de que los conductores son groseros en el uso del claxon, sino que los autos, las casa y los comercios, instalan alarmas que están produciendo ruido dia y noche, se puede decir que es una ciudad histérica.
Por otro lado los jóvenes son unos canallas que usa las paredes para mancharlas, desacreditar a otro ser humano como pasquín y ni siquiera para hacer arte o expresar ideas; las bandas juveniles lo ensucian todo a su paso, sin importar para nada nada.
Otro de los elementos degradantes de la ciudad es la conducta de su gente, que usan las areas turísticas y cualquier lugar para vomitar luego de beber. Este espectáculo en especial de mujeres borrachas, y jóvenes que es inusual en otras partes del país aquí es lo cotidiano en el fin de semana.
Uno de los elementos fundamentales que se debe considerar para calificar como ciudad maravilla, es las calidad de su gente, pero la gente de Quito rara veces sonríe, guarda un gesto agresivo y hostil en los lugares públicos, pues viven a la defensiva, ya que esta ciudad es la Meca de los ladrones sutiles que por lo general son gente local y de los ladrones groseros y brutales, que por lo general son migrantes o o visitantes en especial de la costa.
Otro elemento para descalificar a Quito como ciudad maravilla, es su sistema de transporte público, en especial el del municipio, que más que un sistema de transporte es un sistema de humillación y un lugar propicio para el robo.
Los taxistas están atentos a la minima posibilidad de sorprender al usuario con los precios de la carrera, a pesar de ser obligatorio los taxímetros, y se robarán el equipaje o le que haya quedado a bordo de sus autos al menor descuido del pasajero, sin contar que se cuentan entre los violadores de la ciudad, cuando tiene la oportunidad con alguna pasajera ebria o que esté a su alcance.
Los conductores, no tienen el menor respeto por el peatón, cuando tienen que curvar en una esquina consideran que es un atrevido el peatón que quiere cruzar la calle y lo envestirán, sin importar edad sexo o condición, se estacionan en la veredas o en las zonas de circulación de bicicletas, se consideran una clase social superior a la de aquellos que van por la vereda caminando, y los ven como alguien inferior al que pueden insultarlo por cualquier incomodidad que les cause.
Los conductores guardan una conducta que estalla al menor detalle en gestos y palabras brutales que desdicen de su cuna y de su valia.
Cuando una mujer camina en la calle o sube a un medio de transporte público, esta sujeta a escuchar groserías a las que llaman piropos, o incluso a ser tocada de mara disimulada o grosera y cualquier reacción de ella en lugar de hacerlos avergonzar, los pone cabreados alevosos y hasta pretenden golpear a la muchacha que se atreve a exigires respeto. Aunque el municipio hace campaña contra esto, se trata de una cultura machista propia de este lugar, por lo que Quito no merece ser considerada una maravilla del mundo
En el centro de la ciudad las esquinas son urinarios, los niños corren serios peligros en esta ciudad si llegan a perderse o se sueltan de las manos de sus padres, en tanto los colegiales son las víctimas más comunes de los ladrones.
Los terminales de transporte terrestre y el aeropuerto están distantes del centro, por lo que sale más caro el transporte al centro, que los pasajes por tierra, sin contar con el tiempo que se requiere.
Estos son entre otras las razones para que Quito no sea considerada una ciudad maravilla, hasta que se logre cambios radicales en los arriba mencionado.