Pero la hija del Dr. Tigre sufrió su primera decepción cuando llegó a un país extremadamente caro, y fue a vivir en una familia, dentro de un programa de "homestay", esta familia de un australiano y una china, a más de que le cobraban caro, le daban minutos para bañarse, y si se demoraba, le cobraban una multa, no le permitían el uso de la cocina, le daban de comer una miseria, le condicionaban su horario de entradas y salidas y buscaban cualquier pretexto para sacarle más dinero. Desesperada salío de ese lugar, y finalmente fue a vivir en una residencia estudiantil, tras una mala experiencia de compartir con otro ecuatoriano, que llevava una vida privada tormentosa y desordenada, la obligó a buscar la posibilidad de una habitacion individual,y la consiguió en una residencia de un college una empresa privada de negocios, donde por menos de 20 metros para vivir le cobran 1300 dólares australianos, sin contar el condominio y la electricidad, por los que paga 200 dólares australianos más, a esto se suma que tiene que dar una garantía y que cuando termina el período, ella y todos los arrendatarios saben que de los 1300 de garantía sólo les devolverán máximo 400, pues encontrarán cualquier pretexto para no devolverle todo el dinero.
Pero el problema no es solo que esta intitucionalización del robo, sino que representando en una competgencia de Tae Kon Do, a la unversidad de Melbourne, la organizadora del evento de la Unviersidad ITM, al ver que perdía la pelea por la medalla de oro, no tuvo ningún escrúpulo moral en cometer una falta, fracturarle la nariz y luego con la mayor desfachatez acercarse a justificar ante la agredida su falta de ética deportiva, lo que significó que la la hija del Dr.Tigre le mostrara el temperamento latino y allí mismo le diera una tunda, pero desgraciadamente no alcanzó a fractrurale su nariz como se lo merecía.
Cuando fue al médico este, que le cobró 400 dólares por la consulta, a pesar de tener seguro, le recomendó una cirugía inmediata, llamó a la compañía de seguros Alliance, y los de la compañía le digeron al médico y a ella que cubrirían el 100% de los gastos, previa la presentación de facturas, Doménica, la hija del Dr. Tigre, tomó el dinero de su beca para pagar los créditos y lo que había ahorrado y pagó más de cuatromil dólares australianos, fue operada y cuando llevó la facturas para su devolución , primero le pusieron la excusa por tres veces de que se les había perdido los recibos. Ante la demora y teniendo que pagar el caro arrendamiento por su alojamiento, buscó por internet una lugar en una página web calificada de seria, lo encontró a pocas cuadras, todo parcía correcto hasta que luego del depósito bancario por el primer mes y la garantía, cuando fue a ver las llaves, le pidieron que pagara dos meses mas, entonces acudió a la policía, le enseño los documentos, y le digeron que esperara, que a lo mejor era un error, esperó una semana en la que dió los exámenes de fin de semestre, abrumada por los engaños, la incertidumbre que estaba viviendo y la falta de dinero.
Ante la situación Dr. Tigre fue a solicitar un préstamo al Seguro Social Ecuatoriano, que de inmediato se lo dieron, pero sólo sumaba 2600 dolares, le envió 1700 para salvar la situación en tanto el resto lo usó para enfrentar emergencias familiares.
Aun recordaba que cuando inició la Fundación Ecotrackers, sus primeros estudiantes de español eran australíanos de Perth, que pagaban $3 dolares la hora de clases en 1999, le parecieron gente maravillosa y no comprendía como podía ser tan diferente la gente de Australia, dentro de su país y cuando viajaban. En Australia parecía que eran unos sere humanos que sólo vivían para el dinero y afuera parecían los seres más humanos del mundo desarrollado, pero también recordaba que en el ultimo viaje que hizo al Río Amazonas, por el Rio Morona, se presentó un problema en el motor de la lancha, los australianos, una pareja y un neozelandes, que sólo habían pajado 200 dólares por persona, por 14 días de viaje, incluida la alimentación, excepto los dos días en el puerto de San Lorenzo en el Alto Amazonas o Río Marañón, se negaron a poner algo más para pagar la refacción, y fue un milagro encontrar un mecánico que aceptó lo poco que portaba el Dr. Tigere, para llegar de retorno a Ecuador. En Ecuador, en la ciudad de Macas, Dr. Tigre y sus hijas tuvieron que dormir el terminal y la americana se apiadó y les prestó dinero para que vovieran a casa en Quito, donde Dr. Tigre le devolvió el dinero prestado. Tras esos malos recuerdos, pensó que lo peor que había hecho en la vida fue darles la oportunidad de hacer trabajo voluntario a extranjeros, pues los extranjeros que querían ser voluntarios eran solo unos vividores oportunistas, que incluso le robaron su know how de trabajo de enseñanza de español y trabajo comunitario, poco tiempo más tarde dejó de funcionar su escuela de español y su programa de voluntarios, por la decepción que significaba servir y ayudar a oportunistas, que lo que querían en realidad era viajar casi gratis. Pero tambié recordaba que tuvo a personas de gran calidad como David Tucket un gentelmen inglés con una estatura moral extraodinaria a sus 74 años, fue el inspirador y administrador de la fundación y Min Ho un voluntario danés de origen coreano, que ahora era su yerno.
Doménica reclamó a la Compañía de Seguros Alliance, a la Universidad de Melbourne, que obliga a los estudantes a cotratar a esta companía, y la Universidad le dijo que cubriría los gastos pues la excusa de Alliance es que la universidad tenía un seguro para deportistas, pero luego la universidad le negó el pago, en tanto la policía le dijo que el Banco de Londres, por donde ella pago a los estafadores, por ley deberá reponerle el dinero una vez que se pruebe que estafa. Solicitó ayuda a la Embajada de Ecuador en Sidney, que solo le envió E.mails, sin siquiera preguntar a la univerisidad que había pasado con la estudiante ecuatoriana que les dió una medalla de oro en una competencia deportiva, donde le fracturaron la nariz.
La Universidad de Melbourne le prestó mil dólares australianos para pagar el segundo mes de arriendo desde que empezó el problema, pero luego se negó a pagar el seguro deportivo. Finalmente acompañando a estudiar a otros ecuatorianos en un restaurante a una de la chicas recién llegadas le robaron su celular, su Ipad, documentos y tarjetas, como en cualquier ciudad de un país subdesarrollado, acudieron a la policía a presentar la denuncia y en ese entrevero, a Doménica se el perdió la tarjeta de ingreso al edificio donde vive, pensó que tenía que pagar quinientos dólares de multa por eso,pues ya estaba con la psicosis de que en Australia cuaquier cosa es pretexto para que las instituciones incluso la Universidad pidieran brutales cantidades de dinero, a un estudiante del tercer mundo, hasta por entregar certificados y notas, menos mal que el portero le dijo que solo le cobrarían cuarenta dólares por la nueva tarjeta de acceso a su departamento.
Para el Dr. Tigre era inaudito que una universidad que gana millones de los estudiantes extrajeros, no tenga residencia estudiantil propia, pensaba Dr. Tigre que vivió en una residencia estudiantil cuando fue a estudiar en Rusia y que sacara partido económico de todo hasta de la respiración de los estudiantes extranjeros de países pobres, a los que exprimía economicamente, cobrando hasta el doble de lo que pagan los estudiantes australianos.
En Australia, si bien la educación puede que sea buena, la vida se resume en tener dinero y consumir droga para encotrar la diversion, en medio de una cultura fashion. En Australia se vive el neoliberalismo extremo, donde las ganancias y el dinero los son todo.
Al pensar en lo estaba pasando su hija, Dr. Tigre pensó: espero que así como Correa aprendió en Estados Unidos como construir la resistencia latinoamericana, a la arrogancia y al poderío de Estados Unidos, tu aprendas en Australia como construir la resistencia global a ese mundo atrofiado del consumismo, y de culto al dinero, a partir de tus estudios de proteccion de la naturaleza y de ambiente. Ponte la camiseta Julien Assange que te regarlé y ve con ella a clases, ya no tienes que esconder tus simpatías por miedo, ya te han sometido a la peor de las toruturas que ellos usan, la tortura económica, como lo hacen con Grecia, Portugal, España o Italia y con cada migrante o estudiante que llegan a esos país capitalistas desarrollados y no te han doblegado. Mil besitos mi amada Doménica Luisa en el día de tu santo el día de San Luis.