Esta invasión de la Embajada de México en Ecuador pasó a ser parte de la llamada Guerra al Narcotráfico, que evolucionó a conflicto interno armado.
Esta guerra al narcotráfico, aparentemente, es una guerra creada por el embajador de los Estados Unidos en Ecuador y la CIA, que le ha permitido a USA volver a las Islas Galápagos, de donde fue sacado por el gobierno del Presidente Velasco Ibarra en 1946, y volver a la Base de Manta, de donde fue sacado por Rafael Correa en el 2010.
El problema se produjo por las declaraciones del presidente Andrés López Obrador, que señaló cómo la muerte del candidato Fernado Villavicencio a la presidencia de Ecuador perjudicó a la candidata del movimiento Revolución Ciudadana, Luisa González.
Es de destacar que el embajador norteamericano tenía tres candidatos para estas elecciones : a Ian Topic, que fue mercenario norteamericano, y estudió en ese país, y a Otto Sonenhosner, que también estudió en USA y fue un leal colaborador de la Emabajada de USA cuando fue vicepresidente de Lenín Moreno, y a Daníel Noboa, que nació, estudió y tiene residencia en los Estados Unidos, pues es ecuatoriano y norteamericano al mismo tiempo.
La muerte de Fernando Villavicencia, que luego de 7 meses y con la presencia del FBI en las investigaciones, no da con el autor intelectual, se debe a que probablemente fue una muerte planeada por la CIA, como antes los hicieron con Lumumba en el Congo, o Allende en Chile.
La muerte de Villavicencio evidentemente perjudicó a Luisa González, pues Villavicencio era su mayor adversario. Su muerte podía vincularse a una maniobra de Luisa González para ganar más fácilmente las elecciones, al no tener un contendor del nivel de Villavicencia, que además la denunciaba a ella y a su partido, por actos de corrupción en el gobierno de Rafael Correa.
El ver a Luisa González como la mala, evidentemente favorecería a los tres candidatos del embajador de los Estados Unidos, Sonelhosner, Noboa, y Topic.
Finalmente, el debate hundió a los otros dos y quedó Noboa, no por lo que dijo, sino por lo que no dijo, porque se calló, porque se escondió, porque no se expuso y los otros dos quedaron como torpes.
Los tres candidatos del Embajador de Estados Unidos tenían en común que los tres querían que Estados Unidos continúe en Galápagos y Manta, pero además querían que Estados Unidos participara en la Guerra al Narcotráfico con soldados traídos para invadir a Ecuador.
Al momento, los norteamericanos controlan Galápagos, Manta, el ejército, la policía, la justicia, la prensa, las cárceles, pero aún no pueden controlar los barrios miseria, ni las playas, las carreteras y puertos por donde entra y sale la droga.
Andrés López Obrador hizo notar que la muerte de Fernando Villavicencio perjudicó a Luisa González, y por ende favoreció a Noboa, uno de los tres candidatos del embajador de los Estados Unidos. Esto irritó al presidente Noboa, que quiere hacernos creer que es presidente de Ecuador porque tiene virtudes y no porque le ayudó la muerte de Villavicencia, ni por la ayuda del embajador de USA.
Pero lo curioso es que 6 de los 12 caputurados por la muerte de Villaicencia fueron asesinados en la cárcel, para evitar que hablaran. Los restantes sólo dicen que fueron contratados por alguien que les ofrecía dinero, pero no sabían quién era.
Hay una mujer que aparentemente recibió el dinero de alguien anónimo para contratar a los asesinos. Todo esto suena a una típica acción de la CIA.
Ahora las relaciones entre Ecuador y México están rotas, pero López Obrador, el presidente de México, puede hacer algo extraordinario que le golpearía al embajador norteamericano que ha sido el tiTIRItero de Lenín Moreno, Guillemo Lasso y de Danie Noboa, los tres presidentes que nos metieron en esta guerra al narcotráfico, y sería permitir la llegada de ecuatorianos a México sin visa, para que crucen la frontera de Estados Unidos, y se acojan a la condición de refugiados por la guerra civil en Ecuador o conflicto interno armado. Incluso les podría ofrecer una ración alimenticia diaria por tres meses a los que crucen por México hacia los Estados Unidos.
Esto se justificaría, pues es evidente que Ecuador está en una catástrofe económica y social por culpa de los tres últimos gobiernos y del embajador de USA. Catástrofe que obliga a los ecuatorianos a salir del país. Así, López Obrador pondría en evidencia a los gobiernos de Lenin Moreno, Guillermo Lasso y Daniel Noboa, leales al embajador de los Estados Unidos que es embajador en Ecuador desde hace 8 años, casualmente desde que se inició la llamada Guerra al Narcotráfico, y Estados Unidos volvió a Manta y Galápagos.