Nuevo intervencionismo norteamericano en las elecciones de Ecuador










Con la finalidad de apoyar a Daniel Noboa, para que vuelva a ser presidente y permita bases norteamericanas en Ecuador mediante una consulta popular que anule la ley en la Constitución del Ecuador del año 2008, que prohibe bases militares extranjeras en Ecuador, Estados Unidos, esta desarrollando un intrincado plan para evitar el retorno del correismo, es decir de los seguidores de Rafael Correa al poder, para esto ha enjuiciado en Miami al que fuera el contralor general de la nación de apellido Polit y a su hijo al que ya ha sentenciado a 10 años de prisión y a pagar millones de dólares.
Esa es la segunda parte de una estrategia que empezó con un juicio a Correa en que se le sentenció a 8 años de prisión por influir psicológicamente en sus funcionarios para robar al país. 
Al momento Estados Unidos  controla al ejercito, la policía, las prisiones, la prensa y los medios de comunicación, y sobre todo a la Presidencia del Ecuador, la Fiscalía General de la Nación, mediante la Fiscal General Diana Salazar,  al Consejo Nacional de la Judicatura,  que lo está purgando de jueces y fiscales corruptos, al Consejo Nacional Electoral mediante Diana Atamaint, su presidenta que al parecer no será cambiada, y se le prorrogará sus funciones hasta después de las elecciones, pues les fue muy util para evitar la participación de Correa en las elecciones anteriores, y para colocar a Daniel Noboa en la presidencia
Estados Unidos considera a Correa como el mas peligroso latinoamericano, pues a mas de conocer muy bien Estados Unidos, pues estudio allá, Rafael Correa pretendió crear la sede de UNASUR  en la Mitad del Mundo, en Quito,  esto es un nuevo paìs, como la Unión Europea, pero sin la tutela de Estados Unidos, y el Consejo Sudamericano de Defensa, que debía desvincular a los países de Sudamérica del TIAR  Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, que es el mecanismo mediante el cual todos los países del llamado patio trasero de los Estados Unidos, se someten a USA, donde no se incluye a Cuba, desde 1960, Nicaragua desde 1980, ni Venezuela desde el año 2002.   Esta tratado permite a los Estados Unidos realizar las Maniobras UNITAS, para entrenar a los ejércitos de América Latina, y al mismo tiempo recabar información de los ejércitos de su patio trasero.


Finalmente sea usando el orden legal del país o manipulando los medios, las elecciones, etc, etc, Estados Unidos quiere a Daniel Noboa en el poder en los próximos 4 años para concretar la ley que permita las bases militares extranjeras en Ecuador, pero además, que Ecuador siga en la Guerra al Narcotráfico, y no como México que quiere salirse ya. de este conflicto que tiene 40 años en América Latina desde los tiempos de Pablo Escobar, el narcotraficante colombiano.


Evidentemente, esto sucede cuando Ecuador se ha convertido en el paìs mas violento de Hispanoamérica y uno de los más violentos del mundo, es el principal exportador de cocaína a Europa, y uno de los focos de las grandes olas migratorias que invaden Estados Unidos.
El momento el gobierno de Daniel Noboa, y el gobierno de Biden en USA, ha obligado a los Ecuatorianos a invadir Estados Unidos, mediante el desempleo, la pobreza, el endeudamiento impagable y la violencia.
Estados Unidos se ha convertido en la principal fuente de empleo legal o ilegal,  eso significa que allá es posible sobrevivir de manera legal o no, pero en Ecuador, al parecer  eso no es posible.
La invasión de ecuatorianos y latinoamericanos a Estados Unidos es una replica de lo que fue la invasión de los Barbaros a Roma, y al parecer Estados Unidos gracias al narcotráfico y las olas migratorias esta perdiendo la capacidad de defender sus fronteras. 
Finalmente el nuevo orden que está en curso en el Continente Americano es la desaparición de las fronteras desde Canadá a la Tierra del Fuego y la Patagonia. 
Esto al parecer será posible sólo si Estados Unidos tiene un presidente latinoamericano, puesto por el voto latino en ese país y para ello se hacen necesario que la población de latinoamericanos en Estados Unidos supere a la de los arios, los afros y  de otro origen.   Además que el español, las costumbres, memoria y tradiciones de los latinoamericanos no se pierda en ese país, como ha pasado con los afroamericanos y los otros migrantes a ese paìs,  que los latinoamericanos inventen su propia forma de trabajar y ser felices en ese país, dejando de estar al servicio de los norteamericanos.
Mientras las remesas sean la principal fuente de ingresos para la población ecuatoriana y latinoamericana al igual que el narcotráfico, no será posible para Estados Unidos ganar la guerra migratoria que está viviendo ni la guerra al narcotráfico.
Solo si la situación económica de America Latina mejora, desaparecen los bloqueos a Cuba, Nicaragua, o Venezuela, que provocan enorme pobreza en la población, la corrupción no asfixia a nuestros países, los salarios en America Latina no son iguales a los de los Estados Unidos, y las materias primas no son mejor pagadas, esta guerra al narcotráfico y esta guerra migratoria,  no la puede ganar USA y los latinoamericanos terminaremos convirtiendo a nuestros países en infiernos como ahora lo son Ecuador, Argentina, o los países aliados de Putin y la Federación de Rusia, como Cuba, Nicaragua y Venezuela, y la misma Rusia que se ha convertido en un país invasor, que ha convertido a Ucrania en el infierno en Europa.

EE. UU. veta la entrada al expresidente de Ecuador Rafael Correa por supuesta corrupción

Estados Unidos anunció este miércoles 9 de octubre que prohibió la entrada al país al exmandatario de Ecuador Rafael Correa (2007-2017) y al exvicepresidente Jorge Glas, a los que acusa de estar involucrados en casos de corrupción.

El vicepresidente Jorge Glas, a la derecha, acompañado por el exvicepresidente Lenin Moreno, a la izquierda, y el presidente Rafael Correa, canta durante una convención del partido, en Quito, Ecuador, 1 de octubre de 2016. La policía ecuatoriana rompió las puertas externas de la Embajada de México en Quito, el viernes 6 de abril de 2024, para detener a Glas, quien residía allí desde diciembre.
El vicepresidente Jorge Glas, a la derecha, acompañado por el exvicepresidente Lenin Moreno, a la izquierda, y el presidente Rafael Correa, canta durante una convención del partido, en Quito, Ecuador, 1 de octubre de 2016. La policía ecuatoriana rompió las puertas externas de la Embajada de México en Quito, el viernes 6 de abril de 2024, para detener a Glas, quien residía allí desde diciembre. AP - Dolores Ochoa
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El portavoz del Departamento de Estado de EE. UU., Matthew Miller, indicó este miércoles 9 de octubre en un comunicado que el expresidente de Ecuador Rafal Correa y el exvicepresidente Jorge Glas "no son elegibles para entrar en Estados Unidos debido a su participación en significativos actos de corrupción durante su mandato".

De acuerdo con la Administración de Joe Biden, el exmandatario ecuatoriano y su 'número dos' abusaron de sus cargos públicos "al aceptar sobornos a cambio de otorgar contratos gubernamentales".

Miller subrayó en el comunicado el respaldo de Estados Unidos para todos los ecuatorianos que estén "comprometidos con aumentar la transparencia gubernamental y exigir cuentas a los funcionarios públicos corruptos".

Correa, quien gobernó de 2007 a 2017 como uno de los referentes de la izquierda latinoamericana, reside desde el fin de su mandato en Bélgica, que le concedió asilo político en 2022, lo que le ha permitido evitar la cárcel en Ecuador.

Sobre el expresidente, que sigue muy presente en la vida política de su país a través de redes sociales, pesa una condena de ocho años de cárcel e inhabilitación por el caso 'Sobornos 2012-2016'.

Glas, quien fue uno de los hombres fuertes del Gobierno de Correa, fue detenido el pasado 5 de abril en el asalto de las fuerzas de seguridad ecuatorianas a la embajada mexicana en Quito, donde este había pedido asilo.

ARCHIVO - El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, habla durante una entrevista en su oficina, en Quito, Ecuador, el 12 de septiembre de 2017.
ARCHIVO - El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, habla durante una entrevista en su oficina, en Quito, Ecuador, el 12 de septiembre de 2017. AP - Dolores Ochoa

Sobre Glas pesaba entonces una orden de captura e ingreso en prisión preventiva por el caso de las obras de reconstrucción posteriores al fuerte terremoto de 2016, donde está imputado por presunto peculado (malversación de fondos públicos), si bien tanto él como Correa se declaran víctimas de persecución política.

Correa responde a la prohibición estadounidense: "¡No hay derecho!" 

Tras enterarse de la restricción impuesta por Washington, Correa aseguró que "no hay derecho" a que el Gobierno de Estados Unidos le prohíba el ingreso a su territorio tanto a él como a su familia directa. 

A través de un mensaje en redes sociales, el expresidente ecuatoriano reivindicó una vez más su inocencia frente a la condena de ocho años de prisión e inhabilitación política que le fue impuesta en 2020 por cohecho en el caso 'Sobornos 2012-2016', mencionado ya anteriormente. 

"La maldad humana... obvian que nadie en el mundo ha aceptado la sentencia por 'influjo psíquico' y que cinco países han dado asilo político a los involucrados en el 'Caso Sobornos'. Meten hasta a mi familia ¡No hay derecho!", expresó Correa, quien siempre cuestiona que en la sentencia donde se le condenó se le atribuyese 'influjo psíquico' sobre los demás involucrados.

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