Coronavirus | Entrevista con el ministro de Salud de Ecuador, Juan Carlos Zevallos: "No se pueden esconder los cadáveres"
Las imágenes de la ciudad ecuatoriana de Guayaquil con cadáveres en las calles son, hasta ahora, las más desoladoras e impactantes que ha mostrado la expansión del coronavirus en América Latina.
En la región, los casos han aumentado exponencialmente y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) dice que la cifra irá en aumento las próximas semanas.
Ecuador, con 17 millones de habitantes, es el segundo país que más vidas ha perdido en la región según las cifras oficiales.
Solo lo supera Brasil, el gigante sudamericano, que tiene una población 12 veces mayor al país andino.
Y las escenas de Guayaquil que dieron la vuelta al mundo revelaron que las cifras oficiales parecen no reflejar la realidad.
También mostraron un sistema sanitario débil y colapsado en esa ciudad.
El presidente Lenín Moreno aceptó que los números “se quedan cortos” y que habría muchos más fallecidos de los que se reportan.
Hasta este 8 de abril, según las cifras oficiales, había4.450 casos de contagio, 242 fallecidos confirmados y 240 muertes "probables por Covid-19".
Pero los ecuatorianos siguen en la incertidumbre.
La cifra real de muertos aún no se conocen y de momento solo hay estimados.
El funcionario del gobierno Jorge Wated, encargado del levantamiento de cadáveres en Guayaquil, dijo este 1 de abril que, según los expertos, los fallecidos pueden llegar a 3.500 por covid-19 solo en la provincia de Guayas a la que pertenece la ciudad, según confirmó el gobierno de Lenín Moreno.
La OPS dice que Ecuador atraviesa una situación extremadamente difícil y que el personal de la salud en el país ha enfrentado la pandemia sin la protección necesaria.
Tampoco se conoce con precisión la cifra del personal de salud contagiado con el virus.
Dentro del propio ministerio de Salud de Ecuador unos funcionarios hablan de más de 1.600 contagiados y otros de más de 400.
En medio de esta crisis sanitaria sin precedentes, BBC Mundo conversó con Juan Carlos Zevallos, ministro de Salud de Ecuador.
A continuación la transcripción de nuestra entrevista.
El gobierno de Ecuador ha admitido que las cifras se quedan cortas.De hecho, se están retirando más de 100 cuerpos de las casas de personas en Guayaquil. ¿Por qué la gente se está muriendo en sus casas sin recibir atención médica?
No creo que esa sea exactamente la situación.
Hay un virus muy agresivo y letal y por lo tanto la cantidad de fallecidos en la ciudad de Guayaquil se ha incrementado. Eso no lo podemos esconder ni lo puede esconder nadie.
No se pueden esconder los cadáveres. Y eso (las muertes) ha aumentado alrededor de un 50% a un 70% de lo que habitualmente se veía en el año 2018 y en el año 2019.
Entonces, ¿por qué en la casa? Porque existe un toque de queda y porque el 99,9% de los cadáveres de los muertos antes los manejaba la familia. La familia era la que contactaba la funeraria, etc. Sin embargo, por las medidas de restricción del distanciamiento social, la cuarentena, etc, todo ese trabajo pasó al gobierno.
Hay también un número significativo de muertes también en los hospitales, es decir, lo que ha aumentado, lo que es nuevo, lo que no existía hasta enero eran las muertes en las casas que no eran manejadas por las familias y las funerarias.
Pero de alguna manera lo que está sucediendo, lo que vemos, los cadáveres en la calle, da cuenta de que el sistema sanitario en Guayaquil, donde se registra el epicentro de esta pandemia en Ecuador, está colapsado.
Yo estoy en Guayaquil, yo moví el Ministerio de Salud para acá justamente para estar en la primera línea y atender esas necesidades. El colapso del sistema sanitario lo hemos vivido acá como lo ha vivido Europa.
Es decir, hay una excesiva cantidad de demanda no solamente de camas hospitalarias y obviamente los cadáveres, los muertos, los fallecidos son una consecuencia de esa demanda grande.
Pero los muertos no se quedan en las calles, están siendo recogidos de una manera oportuna. En este momento no hay nadie, ninguna casa en Guayaquil con cadáveres en sus hogares.
Y además de eso nos hemos empeñado no solamente en recoger los cadáveres sino en darle a cada uno de esos desafortunadamente fallecidos una muerte digna.
Por eso es que hemos contratado nichos o bóvedas para que los cadáveres puedan ser enterrados en los camposantos.
El presidente Lenín Moreno ha pedido que hagan públicas las cifras de muertos aunque sean dolorosas y yo me preguntaba si es usted la persona que puede transparentar esas cifras y decirnos de cuántos muertos estamos hablando en realidad.
Por supuesto y yo estoy completamente de acuerdo, es un lineamiento común el que seguimos tanto el presidente Moreno como el resto del gobierno.
Las cifras hay que decirlas, los muertos no pueden esconderse.
Como le decía al principio, esas cifras de cuántos fallecidos existieron en un momento dado, las podemos decir: antes en Guayaquil había alrededor de 35 muertes por día, hoy subimos a 150.
Entonces, esos cadáveres que como le digo los manejaba antes la familia y las funerarias particulares, los tenemos que manejar ahora como gobierno.
Tomamos acciones, sí, pero se necesita una logística muy grande. Hoy, este momento, yo le aseguro que no hay ningún cadáver por recoger, a no ser que haya sido un fallecimiento reciente.
Teniendo en cuenta ese número que usted acaba de dar, esa relación (de muertos) antes de coronavirus y en el momento de coronavirus, entonces de cuántos muertos podríamos estar hablando en Ecuador?
De un aumento de un 60% de (las muertes) que usualmente se daban.
Esto va cambiando también, porque al principio, y esto es diario, las cifras que yo le estoy dando son cifras diarias de mortalidad.
Hubo días en los que hubo muchos más muertos que otros. Entonces las cifras las vamos a dar, no solamente por el número de muertes y fallecidos al día, sino que las vamos a transparentar, y es así como se está comunicando ahora el número de muertes tanto extrahospitalarias como las que ocurrieron dentro del hospital.
También vamos a dar por grupos de edad, sexo y por la probable causa de mortalidad.
Determinar que una persona falleció por coronavirus no es una cuestión fácil.
Primero es un virus nuevo y, segundo, la sintomatología se parece muchísimo a las infecciones respiratorias agudas graves. Esa es la razón por la cuál hemos implementado desde ayer un sistema que se llama la autopsia verbal.
Vamos a entrevistar a todos y cada uno de los deudos de pacientes que han fallecido para entender cuáles de esas causas fueron covid-19.
Pretender no mostrar los datos es algo que no está en nuestros planes ni va a estar.
Nosotros queremos mostrar los datos que han sido. Sobre todo porque digo es un virus letal, para el que no hay cura. Entonces obviamente la cantidad de muertes debe darse.
Pero su predecesora había renunciado al Ministerio de Salud diciendo que no contaba con los recursos suficientes para darle la batalla a esta pandemia. Esta situación que estamos viendo ahora ¿demuestra que tenía razón? ¿Cuáles son los recursos con los que usted cuenta?
Los recursos que nosotros tenemos son suficientes. Déjeme darle algunas cifras. Algunos ejes que hemos tratado desde el punto de vista estratégico.
Contrataciones por ejemplo de personal, contrataciones rápidas. Todo el talento humano que se necesita para afrontar esta crisis.
Hemos tenido que golpear la puerta de posgradistas, médicos rurales, médicos de otras especialidades para que vengan y sirvan a Guayaquil. La contratación rápida es una de nuestras estrategias.
La segunda parte es todos los insumos y toda la infraestructura que se necesita.
Insumos para proteger al personal de salud y la infraestructura necesaria para el aumento del número de camas y para cambiar desde el número de hospital regulares hacia cuidados intensivos.
Hoy, en este momento en Guayaquil, tenemos suficiente números de camas para seguir recibiendo a los pacientes.
Es más, hemos designado dos de los hospitales para que sean solamente para recibir pacientes de covid-19. Esto es lo correcto de hacer, es más fácil y eficiente.
Sin embargo, no nos hemos descuidado tampoco del resto de los hospitales.
El resto de los hospitales no está atendiendo covid-19 sino las dolencias normales o las cuestiones naturales que existen y que exigen hospitalización.
Por ejemplo, hemos tenido más de 300 partos durante este período de la pandemia.
Ministro, usted dice que cuenta con los insumos suficientes. Sin embargo hay un dato que es muy alarmante.1.600 miembros del personal de la salud están contagiados, lo que significa que es más del 40% del total de casos que, según el último parte, son 3.646.
¿Cómo se explica esto si realmente están bien protegidos y representan esta cifra respecto a la cantidad de contagiados?
Mire, hemos aprendido de todo lo que comenzó en China, de lo que sucedió en Europa y de lo que está sucediendo ahora en Ecuador.
La gran mayoría de los contagios no se producen dentro del hospital, sino fuera. Eso es lo que en realidad explica por qué hay tantas personas del personal de salud, personal profesional de la salud, médicos, etc. que están con estas cifras tan altas.
Pero es parte del contagio comunitario, del contagio extrahospitalario.
Le voy a dar un dato. En China, las fuentes oficiales muestran que 40.000 trabajadores de la salud fueron destinados a Wuhan luego de que estalló la crisis. Ninguno se infectó.
Yo tengo testimonios de médicos aquí en Guayaquil que han trabajado incansablemente varios días atendiendo a pacientes de manera permanente con infectados de coronavirus y no están infectados. ¿Por qué? Porque tienen la protección adecuada.
Han tenido la protección y los insumos adecuados. Entonces el contagio, y esta es una realidad que además se verifica en cualquiera de los otros países, no viene necesariamente por pacientes infectados sino por contaminación comunitaria.
Ecuador ha realizado por momento 12.000 tests en lo que va de emergencia. Chile, por ejemplo, que es un país que tiene solo 2 millones más de habitantes que Ecuador, puede hacer 7.000 tests en un solo día.
Me pregunto si el número de tests que está haciendo Ecuador es una de las razones de este subregistro que ha habido y es una de las razones de lo que puedes haber fallado en la estrategia del país.
Usted tiene razón en la primera parte. Hay un subregistro, eso no se puede esconder tampoco. Igualmente que decía yo el problema de los cadáveres, los pocos tests que se han hecho, es así.
También hay que tener en cuenta que se ha escogido mejor a quién se le va a hacer el test y la prioridad para nosotros ha sido el personal de la salud, los militares y policías que están en la calle. También las personas que mantienen la alimentación, que mantienen toda la cadena alimentaria.
Esas son las personas a las cuáles vamos a continuar haciendo los tests.
Hoy llegan 100.000 pruebas rápidas que no estaban disponibles en el país hasta el día de hoy y otras que estaban disponibles en el país y otras 100.000 pruebas PCR (de laboratorio) que se van a hacer.
Además de eso, hemos abierto la posibilidad de que laboratorios privados y universidades realicen el PCR.
Estamos con una estrategia que va a aumentar el número de casos, va a identificar mejor los casos.
Ministro, ¿cuándo puede empezarse a ver una luz al final del túnel, teniendo en cuenta que Ecuador se acerca ya a su tercera semana de cuarentena?¿Cuáles son la proyecciones que tiene el Ministerio de Salud?
Siempre hemos visto una luz al final del túnel. Tenemos todas las condiciones, la experiencia, los contactos internacionales y un trabajo mancomunado para la resolución de una crisis y una pandemia letal a nivel local.
Yo creo, como usted dice, que de acuerdo a la distribución, a la vida natural del virus, en esta semana o en los próximos 10 días veremos un aplanamiento de la curva.
No quiero sonar optimista, para nada. Quiero ser objetivo. Tanto, que las medidas van a mantenerse hasta el fin de semana del 12 (de abril), después de Semana Santa.
¿Por qué? Por que creo que ahí es el momento oportuno para hacer una reflexión, mirar los datos y ver a dónde vamos.
Otra cuestión interesante que usted tiene que tomar en cuenta es que lo que sucede en Guayaquil no sucede en Quito ni en la región de la Amazonía porque son diferentes las curvas epidemiológicas que se presentan.
Este enlentecimiento de la curva exponencial la viviremos en Guayaquil en los próximos días, pero también tenemos que pensar, por ejemplo, en Quito, la segunda ciudad con más casos contaminados, de nuevo, importados de Europa de manera inicial y que poco a poco van diseminándose a nivel de la comunidad.
Entonces ahí la estrategia va a ser diferente, ajustada a la realidad de Quito pero basada en la experiencia de Guayaquil.