Gestern ging meine Tochter, die mit ihrem Mann aus Dänemark, wo sie lebt, für einen Monat eingereist ist, zum Standesamt, um ihren Personalausweis zu verlängern, und man sagte ihr, dass es nur Termine nach zwei Wochen gäbe, und ich erinnerte mich daran, dass man zu Zeiten von Correa den Ausweis in einer Stunde bekommen konnte, dass ich vor einem Monat zur Verlängerung meines Ausweises ging und es nur eine Stunde dauerte.
Eine korrupte Frau, die im Standesamt am Eingang arbeitet, hat sicher einen Pakt mit einem Bearbeiter, so dass, wenn jemand nicht auf das Dokument warten kann oder will, er nur eine Person bezahlen muss, die das Geschäft mit den Angestellten oder dem diensthabenden Leiter des Standesamtes eingefädelt hat, denn die Chefs wechseln jederzeit und müssen jeden Tag Geld verdienen, um diese Zeitarbeit ausnutzen zu können.
Wir erleben die letzten Monate der Regierung von Guillermo Lasso, und seine Beamten der freien Entlassung, d.h. die Chefs, die Direktoren, die nur wenige Tage Zeit haben, um Geld zu verdienen, müssen dies auf schmutzige Art und Weise tun, auf eine trickreiche Art und Weise, unter dem Tisch, und es muss viel sein, denn dann sind sie wieder zu Hause und warten auf eine andere öffentliche Position oder einen anderen Vertrag in der nächsten Regierung oder in ihrem eigenen Unternehmen.
Seit zweitausendsechs haben die behinderten, opportunistischen Frauen und Männer die Macht in Ecuador übernommen. Sie wissen, dass die Zukunft eine Lüge ist, mit der sie an die Macht gekommen sind, indem sie die Menschen glauben machen, dass mit ihnen an der Regierung das Glück vor der Tür steht und dass sie wissen, wo es zu finden ist.
Während der Zeit von Rafael Correa, einem Herrscher, der in 10 Jahren das scheinbar Unmögliche erreicht hat, der uns gezeigt hat, dass es möglich ist, die besten Straßen zu haben, an den 100 besten Universitäten der Welt zu studieren, das beste Stromnetz, Staudämme, Internet, Gesundheit, Bildung zu haben, hat er aber, ohne es zu merken, das Land zur politischen Beute derer gemacht, die ihn verraten würden, derjenigen, die bei den nächsten Wahlen das Land verpfänden würden, von den Galpagos-Inseln bis zu den täglichen Steuern, um Kredite und Gefälligkeiten der Vereinigten Staaten oder der internationalen Banken zu bezahlen, und damit die Zukunft unserer Kinder und Enkelkinder verdammen, wie zu Zeiten der Kolonie, als es El Concertaje gab und die Schulden vom Vater auf den Sohn übertragen wurden.
Es ist schrecklich, dass Correa als Sprungbrett für Lenín Moreno oder Guillermo Lasso gedient hat, trotz all des Guten, das er getan hat.
Wir waren leichte Opfer der Pandemie und der zivilen Gewalt, die uns jetzt in Ecuador und Lateinamerika erdrückt, wo wir den Krieg gegen den Drogenhandel erleben, weil Kokain und Drogen für die spanischen Eroberer wie Gold, für die europäischen Kolonisten wie Land oder für die großen transnationalen Unternehmen des 20.
Wir sind in der Angst gefangen, die zum Mediengeschäft der Wahlen geworden ist. Angst verkauft sich heute, bringt Regierungen an die Macht, verkauft Medikamente, Impfstoffe, Versicherungspolicen.
Wir sind gefangen in der Korruption, die das Machtzentrum der Bürokratie ist. Lehrer, Ärzte, Richter, Polizisten, Militärs oder andere Beamte sind in Gewerkschaften organisiert oder werden zu opportunistischen Parasiten, die an der Macht sind, bis die künstliche Intelligenz kommt und die Maschinen sie ausschalten.
Macht, Reichtum, Informationen, Drogenhandel, internationale Kredite, Handelsabkommen, Kriege, Verträge sind zum Geschäft geworden.
Verhandeln heißt jetzt Politik. Verhandeln heißt gewinnen, egal was passiert, selbst die Mafia weist darauf hin, dass im Geschäft Moral und Ethik nicht zählen, wenn man töten muss, muss man töten. Verhandeln ist
der Kult des Gottes Geld, aber Geld respektiert weder das Gesetz, noch die Moral oder irgendeine soziale Norm, es ist der größere Profit, wenn man vergewaltigen, stehlen, krank werden, Krieg führen, ein Menschenhändler sein oder korrupt sein kann.
Verhandeln ist auch der Kauf und Verkauf von Gewissen, dem eigenen und dem der anderen.
Wenn man das Eigene verhandelt, das, was die Frucht der eigenen Investition, des Erbes, der eigenen Arbeit oder Unternehmungen, des Studiums oder des günstigen Augenblicks ist, nennt man es Reichtum.
Wenn das, was gekauft und verkauft wird, die Rechte der Einwohner eines Landes sind, die gezwungen werden können, Steuern zu zahlen, in einem Krieg zu sterben, auszuwandern, der Regierung des Aufruhrs zu gehorchen, nennt man es Macht.
Wenn es sich um ein neues Wissen, eine Erfindung, eine Innovation, eine neue Art, etwas zu tun, handelt, nennt man das Technologie.
In Ecuador ist die Politik zum Fanatismus geworden, zu einer sozialen Droge, genau wie die Religion, der Sport, die Medien oder die Regierung, sie sind eine Form des Götzendienstes, bei dem der GOTT DOLLAR der wahre Gott ist, und im Gegensatz zu allen Göttern hat er keine Ethik, Moral oder Gesetze, das Geld dient dem Geld, es gehorcht dem Geld.
EN ESPAÑOL
Ayer mi hija que llegó por un mes con su marido de Dinamarca, donde está viviendo, fue al Registro Civil a renovar su cédula de identidad y le dijeron que sólo había turnos para después de dos semanas.
Es que una mujer corrupta que trabaja en el Registro Civil a la entrada, de seguro, tiene pactado con un tramitador, para que si alguien no puede o no quiere esperar por el documento, sólo tiene que pagar a una persona, que tiene amarrado el negocio con los empleados o el director del Registro Civil de turno, porque a los jefes los cambian en cualquier momento y tienen que hacer dinero cada día, para poder sacarle porvecho a este empleo temporal.
Estamos viviendo los últimos meses del gobierno de Guillermo Lasso, y sus funcionarios de libre remoción, esto es los jefes, los directores, que sólo disponen de días para ganar dinero, lo tienen que hacer de manera sucia, de manera tramposa, por debajo de la mesa, y tiene que ser en grande, porque luego estarán nuevamente en sus casas, a la cecería de otro cargo público o contrato con en el próximo gobierno, o en su propio negocio.
Desde el año dos mil seis, los discapacitados, las mujeres y hombres oportunistas se convirtieron en poder en Ecuador. Ellos saben que el futuro es una mentira con la que llegaron al poder, haciendo creer que con ellos en el gobierno, la felicidad está a la vuelta de la esquina, y que ellos saben donde está.
Durante la época de Rafael Correa, un gobernante que en 10 años logró lo que parecía imposible, que nos mostró que si era posible tener las mejores carreteras, estudiar en las 100 mejores universidades del mundo, tener la mejor red eléctrica, represas, internet, salud, educación, pero, sin darse cuenta convirtió al país en botín político de los que lo traicionarían, de los que en las próximas elecciones hipotecarían al país, desde las Islas Galpagos hasta los impuestos de cada día, para pagar préstamos y favores de Estados Unidos o la Banca Internacional, condenando el futuro de nuestros hijos y nietos, como en el tiempo de La Colonia, cuando existía El Concertaje, y las deudas pasaban de padres a hijos.
Es terrible que Correa haya servido de trampolín a Lenín Moreno, o a Guillermo Lasso, a pesar de todo lo bueno que hizo.
Hemos sido víctimas fáciles de la pandemia, y de la violencia civil, que ahora nos asfixia en Ecuador y América Latina, donde estamos viviendo la Guerra al Narcotráfico, porque la cocaína y las drogas pasaron a ser como el oro para los conquistadores españoles, la tierra para los colonos europeos, o el petróleo para las grandes transnacionales del siglo XX, es decir, el narcotráfico es lo que mas dinero da rápidamente en países pobres, gracias a que como robar, o matar, las enfermedades o la guerra son ilegales y sorprendentes.
Estamos atrapados en el miedo, que se ha vuelto el negocio en los medios de comunicación, de las elecciones. Hoy el miedo vende, pone gobiernos, vende medicamentos, vacunas, pólizas de seguro.
Estamos atrapados en la corrupción, que es el centro del poder de las burocracias, los profesores, médicos, jueces, policías, militares o cualquier funcionario público, están organizados en sindicatos, o convertidos en pársitos oportunistas, en poder, hasta que llegue la Inteligecia Artificial y las máquinas los saquen.
El poder, la riqueza, la información, el narcotráfico, los prestamos internacioanales, los acuerdos comerciales, las guerras, los tratados se han convertido en negocio.
Ahora se llama política a negociar. Negociar es ganar a como de lugar, incluso la Mafia, señala que en los negocios la moral y la ética no cuentan, si es preciso matar, hay que hacerlo. Negociar es
el culto al dios dinero, pero el dinero no respeta la ley, la moral o cualquier norma social, es mayor la ganancia cuando se puede violar, robar, enfermar, hacer la guerra, ser traficante, o corrupto.
Negociar es también la compra y venta de la consciencia, de lo propio y lo ajeno.
Cuando se negocia lo propio, lo que es fruto de la inversión, herencia, el trabajo propio o sus empresas, del estudio, o del momento propicio, se llama riqueza
Cuando lo que se compra y se vende son derechos de los habitantes de un país, a los que se les puede obligar a pagar impuestos, a morir en una guerra, a emigrar, a obedecer al gobieno de turmo, se llama poder.
Cuando se trata de un nuevo conocimiento, de un invento, de una innovación, de una nueva forma de hacer algo se llama tecnología.
En Ecuador la política se han convertido en fantismo, en droga social, al igual que la religión, el deporte, los medios de comunicación, o el gobierno, son una forma de idolatría, donde el DIOS DOLAR es el verdadero dios, y a diferencia de todos los dioses, no tiene ética, moral, ni ley, el dinero sirve al dinero, obedece al dinero.