Lo más maravilloso de la INTERNET y del celular es que nos convirtió a todos los seres humanos en creadores personajes de contenidos y mensajes. Antes sólo los que eran dueños de los medios, como estaciones de radio, de televisión, de periódicos o imprentas, sean personas, empresas o gobiernos, eran los que tenían voz, o escogían a quien le daban voz, texto e imagen, luego con el correo, la fotografía, y los casete, fue posible que cada ser humano pudiera expresarse , que sus pensamientos recorrieran distancias, perduraran en el tiempo. Hoy eso es posible, se puede enviar imágenes y palabras en tiempo real, desde cualquier parte del mundo, y perpetuarlas, atrapamos lo que parecía imposible, el tiempo, nuestros contenidos pueden superar idiomas, o distancias.
Pero la radio, la prensa, la televisión, que todavía están en manos de ricos o de gobiernos, que aun son las que ponen o quitan gobernantes, hacen denuncias, presionan a la justicia, son en realidad el primer poder del Estado, como lo fueron siempre, desde 1776 en que nació Estados Unidos, en que la gente tienen que votar para elegir o ser elegido, o 1917 en la Revolución Rusa, y aunque los medios digan que son el cuarto poder, En nuestros días conservan su poder porque pueden transmitir eventos costosos, como películas, elecciones, campeonatos o eventos deportivos, shows, que requieren mucho dinero para su montaje.
Pero los curiosos que acuden a esos eventos, roban imágenes, instantes, sonidos, todo lo que producen interés colectivo, y los suben de inmediato a la internet, ya los grandes medios no tienen el privilegio, entonces los dueños de radios, canales de TV, o periódicos, que ahora tienen una competencia, que llaman desleal, procuran ganar o mantener audiencias, mediante los derechos de exclusividad, pero sobre todo haciendo creer al mundo, que sólo ellos producen información verificada, cierta, comprobada, lo cual no es cierto, ellos producen información conveniente, sea para el dueño del medio, para el gobierno, o para los que financian los medios mediante publicidad.
La publicidad se convirtió en el financista y regulador de los contenidos de internet, de los contenidos de los grandes medios. Pero la publicidad se convirtió en mentira, engaño, persuasión, repetición desde los tiempos de la fiebre de las medicinas de patente en Estados Unidos. se convirtió en religión en los tiempos de Hitler en que el nazismo que predicaba que una mentira repetida miles de veces se convierte en verdad. El marketing como se llama ahora a esta nueva religión concebida como el arte de vender, es algo que existe desde que existe el comercio, pero hoy incluye desde la construcción de grandes centros comerciales, hasta grandes campañas publicitarias. La publicidad que se monta en nuestros contenidos de internet, los distorsiona, como las malas compañías distorsionan la imagen de cualquier hombre o mujer, se ha convertido en las riendas que dirigen las masas humanas.
Pero el tiempo que ahora se ha convertido en moda, como la moda del narco-consumo que estamos viviendo, igual que antes se vivió la moda del alcoholismo, del tabaquismo, o la moda en el vestuario, en la música. La moda es la que marca la caducidad de los contenidos de INTERNET o de los medios. El problema es que la moda es un invento humano, que trasciende fronteras, que produce al mismo tiempo atracción y repulsión, la moda persiste mientras las fuerzas de atracción, que tienen que ver con las necesidades de las personas en un tiempo están vigentes, cuando estas necesidades cambian, cambian las fuerzas de atracción y cambia la moda. Pero la publicidad se ha convertido en un creador de necesidades.
Este es el drama que viven los contenidos de internet, que si bien se pueden conservar en la nube por siglos, es transitorio, muta, cambia de manera incontrolable, lo que ahora nos hace reír o llorar, mañana no, lo que nos divierte ahora, mañana no, lo que es muy bueno, porque da oportunidad al ingenio humano de renacer todos los días, de crecer e incluso de multiplicarse.
Hoy la Internet es una selva muy peligrosa para los clientes, o para los internautas, es un lugar, donde las hormigas, a pesar de ser pequeñas, son tan peligrosas como los jaguares, donde hasta poderosos gobernantes pueden sucumbir, al igual que inocentes niños o adolescentes, es una arma de guerra, al igual que una herramienta de estudio.
Es que ahora el diablo sabe mas por la Internet y el celular que por diablo.